Las empresas caen con frecuencia en la “trampa” de tener que estar en todas las redes sociales, siguen haciendo esto mismo por que no parten un análisis cuidadoso del escenario social y de los que implicará para la marca.
Se puede notar y afimar que las empresas se dejan llevar por la marea y por lo que todo el mundo parece estar haciendo, esto claro, es un error, ya que están destinando recursos a cosas que no lo necesitan y dejando otras áreas que realmente necesitan atención y enfoque.
Esto no necesariamente quiere decir que haya que abandonar las redes sociales en las que no se consigue engagement, se tiene que pensar en el potencial de valor y resultados que puede aportar una red social. Partiendo de eso, establecer si se quiere o necesita estar.
Las redes sociales son un espacio más de la estrategia de marketing y como tal, tienen que ser analizados con cuidado. Analizar a qué mercado se va a llegar es lo primero que las empresas deben definir al tener presencia en alguna red social.
En vez de multiplicar esfuerzos intentando estar en cuanta red social existe, a veces es mejor centrarse en una sola o dos. Hazlo bien en una y no hacerlo mal en todas.
Al final, el mejor consejo que se puede dar es el escuchar al experto en redes sociales, no solo conoce de todas y cada una, sino que además conoce muy bien las necesidades de la empresa. Si el community manager dice que no se necesita Pinterest, sus razones tendrá para ello.